Esta maravillosa devoción dejada por los sacerdotes Jesuitas, se ha mantenido en el tiempo por personas devotas, que anualmente abren las puertas de su hogares para alabar al Señor, rezando durante nueve días el Santo Rosario y a continuación la Novena Jesucristo, la Virgen o Santo según sea la promesa o compromiso contraído en familia.
Hoy fue don Miguel Guzmán en la localidad de Corneche, lugar ubicado en el interior de la Comuna de San Pedro de Melipilla, quien nos invitó cordialmente a rezar y cantar a la Virgen del Carmen. Ahí compartimos una profunda religiosidad, respeto por el Cantor a lo Divino y el mensaje entregado por éste.
También destacaremos y disfrutaremos a don Miguel Guzmán, don Juan Salvador Castro y don Prudencio Vargas, cantando aquellos versos aprendidos desde niños; con las melodías o toquíos, como le denominan ellos mismos, trasmitidos en forma oral por sus padres, abuelos y bisabuelos.
Don Miguel nos dice que no conocieron las Escuelas, los versos fueron el silabario para aprender a leer y, ahí me remonto a lo que tantas veces nos señala don Domingo Pontigo, sobre la importancia de este tipo de evangelización en la cultura de Chile.